Los disruptores endocrinos son sustancias capaces de interferir con los sistemas reproductivo, neurológico e inmunológico, alterando sus funciones y poniendo en jaque tanto nuestra propia salud, como la de nuestra progenie. Una vez se cuelan en el sistema, provocan estragos en nuestro engranaje neuroendocrino, bloqueando los receptores o interfiriendo en la síntesis y regulación de las hormonas oficiales.
Podemos minimizar la dosis de aquellos sobre cuya exposición ejercemos algo de control. Y solo necesitamos tener un pelín de cuidado con:
- Los cosméticos (incluye todo tipo de cremas, desodorantes, champús, jabones, tintes, maquillajes y artículos de higiene personal en general). Intenta que no contengan como mínimo parabenos, ftalatos, ni idealmente una larga lista criptográfica de ingredientes obscuros.
- La comida o bebida en latas y recipientes de plástico (en especial, calientes). Liberan bisfenoles, unos xenoestrógenos muy potentes, cuya concentración es significativamente mayor en las mujeres con SOP.
- Los herbicidas y pesticidas con los que riegan los campos de cultivo y cubren las frutas y hortalizas. Lava a conciencia toda la fruta y verdura que consumas y cómprate un dosel anti-mosquitos para la cama, pero no estés toda la noche respirando veneno.
- Las sartenes antiadherentes contienen sustancias químicas perfluoradas que se resisten a la biodegradación. Las mejores opciones son los utensilios de cocina de hierro fundido, acero inoxidable o cerámica de calidad.
- Los ambientadores y fragancias sintéticas. Añadir fragancia a un producto no afecta a su eficacia como tal, por lo que se pueden elegir jabones, productos de limpieza y detergentes para la ropa sin fragancias que funcionan estupendamente. Los aceites esenciales son una alternativa maravillosa.
Y aprovecho para recomendarte con todo mi cariño que te pongas una mascarilla y también guantes cuando andes «marujeando» con lejías y limpiahogares diversos.
No podemos controlar todos los factores que irrumpen en nuestras delicadas coreografías hormonales y lo vuelven todo del revés, pero estos, afortunadamente… sí.
¿Quieres ampliar información? Solo tienes que elegir cómo y cuándo. ¡Y ojalá sea hoy!
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¿Nos das una oportunidad… a ti y a mí?
No eres tú, es tu dieta.
¿Tienes dudas?